La
ehrlichiosis canina es una enfermedad sistémica que afecta a los glóbulos
rojos y plaquetas, que es transmitida por garrapata.
Etología.
Agentes etiológicos.
Ehrlichia canis.
Ehrlichia platys.
Trasmisión.
La garrapata del género Rhibicephlus sanguineus es el vector y
reservorio primario y puede transmitir la enfermedad hasta 5 meses después de haber adquirido la bacteria, de igual manera la enfermedad se puede transmitir por
transfusión sanguínea.
El período de incubación es de 7 a 21 días
Signos clínicos.
Los signos clínicos
suelen ser muy inespecíficos y progresan desde agudos a crónicos, por lo regular el
animal suele estar infestado de garrapatas, puede o no tener hipertermia, anorexia,
depresión y estar apático.
Además,
observaremos una hiperplasia reticuloendotelial, linfanodepatía generalizada, esplenomegalia y
trombocitopenia.
En el hemograma, la fase aguda puede
mostrar una ligera anemia normocítica normocrómica, ligera leucocitosis y con
muchísima frecuencia suele aparecer trombocitopenia.
En
esta fase puede ocurrir una recuperación espontánea y el animal puede quedar asintomático.
La fase
crónica, la médula ósea
se torna hipoplásica y los linfocitos y las células plasmática
infiltran diversos órganos. Dependiendo del órgano afectado y el
grado de afección, los signos clínicos son variables, pudiendo causar
esplenomegalia, glomerulonefritis, insuficiencia renal, neumonía intersticial, uveítis
anterior, ceguera permanente y meningitis con ataxia cerebelar, pérdida
de peso.
En el
hemograma, se suele
presentar pancitopenia, anemia no regenerativa muy marcada y
trombocitopenia. los animales con este cuadro clínico por lo regular
presentan epistaxis, hematuria, melenas, petequias y equimosis cutáneas y mucosas orales
y oculares blanquecinos.
Lesiones.
Durante la
etapa aguda, las lesiones por lo general no son específicas, pero se observa
esplenomegalia y pulmones decolorados. Histológicamente hay evidencia de
una hiperplasia linforeticuliar y manguitos perivasculares linfociticos y plasmáticos
y el aumento de infiltración en los órganos de células mononucleares.
Diagnóstico.
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| Frotis sanguíneo con cuerpo inclusión. |
Se basa en la
exploración física y la historia clínica, el hemograma nos ayudará a
sospechar de esta enfermedad cuando veamos paciente con trombocitopenia,
anemia y presencia de garrapatas o historial de garrapatosis.
También se
confirma con pruebas serológicas, por ejemplo, Snap 4DX plus.
De igual
manera un frotis sanguíneo nos ayudaría en el diagnóstico al observar cuerpo de inclusión
en glóbulos rojos y plaqueta, tomando en cuenta que existen
otros hemoparasitos capaz de provocar lesiones y sintomatología similares.
Diagnóstico diferencial.
En la fase aguda, este debe de incluir otras
causas de fiebre y linfadenomegalia, por ejemplo:
- fiebre de la
montaña rocosa.
- Brucelosis.
Enfermedades
inmunológicas:
- trombocitopenia
y lupus eritematoso sistémico y linfosarcoma.
En la fase crónica se debe descartar:
- intoxicación
por estrógenos.
- mieloptisis.
- pancitopenia
inmunológica.
Otras
enfermedades sistémicas:
- glomerulonefritis.
Tratamiento.
El fármaco
de elección para todas las cepas de ehrlichiosis:
- La tetraciclina (22mg/kg, vía oral, cada 12 horas) durante 21 a 45 días.
- Se
recomienda doxiciclina (5-10 mg/kg/días, por VO o IV) cada 12 a 24 horas, durante 21 a 45 días.
- La
oxitetraciclina (8-12 mg/kg) cada 12 horas, durante 21-45 días.
- La administración
de 2 dosis de dipropionato de imidocarb (5-7 mg/kg, por vía IM) con un intervalo
de dos semanas es eficaz para esta enfermedad.
En 21 días
se deberá repetir el hemograma para verificar la eficacia del tratamiento
y ver cómo se va recuperando nuestro paciente, también se recomienda una
química sanguínea completa, para evaluar la correcta funcionalidad de los órganos
o en su defecto apreciar si existe lesiones en uno o más órganos y que
tratamiento seria el correcto.
En caso de
hemorragias extensa puede ser necesario las transfusiones plaquetas o
sangre completa.
Daremos un
tratamiento de apoyos para la fiebre con el uso de antipiréticos (aines y
corticoides), para ayudar a combatir la anemia indicaremos vitaminas con alto
contenido de hierro y vitaminas del complejo B, entre otras, y siempre tener en
cuenta usar protector de mucosa gástrica (omeprazol, sucralfato, etc.) ya que
la antibioterapia suele irritar la mucosa gástrica.
Esta
se llevará a cabo con el control del vector (garrapatas), fumigando periódicamente
con acaricidas y utilizando fármacos de larga duración para el control de
la misma, por ejemplo, pastillas nexgard, bravecto y simparica.
